¿Qué es criticidad? - Método para establecer análisis crítico

La criticidad es un método que se utiliza para realizar un análisis crítico para establecer la importancia o prioridades de equipos, activos o instalaciones en una operación. Consiste en examinar y evaluar la importancia, riesgos e impactos para identificar y priorizar los elementos más relevantes para el funcionamiento de un negocio o empresa.
Para orientarte en cómo establecer el análisis crítico de los equipos o activos de una operación, aquí verás todo sobre el concepto de criticidad. También conocerás todas sus implicaciones en la operación de una empresa.
¿Qué es el análisis de criticidad?
El análisis de criticidad implica asignar una puntuación de riesgo a los activos con el fin de evaluar su importancia. Según la norma ISO 31000:2009, el riesgo se define como el impacto de la incertidumbre en los objetivos. En este contexto, se considera el riesgo como todas las posibles formas en las que los activos pueden fallar. También se toma en cuenta los efectos que esto puede tener en el sistema y en su funcionamiento global.
Este proceso puede combinar el uso de algunos sistemas de gestión de riesgos como el Hazop. También incluye el Análisis de los Modos de Fallo y sus Efectos (AMFE) y el Análisis de los Modos de Fallo, sus Efectos y su Criticidad (AMFEEC).
Una vez que se completa el análisis de criticidad, se realiza un AMFE en los activos más críticos. Estos son los que representan el 20% de los activos más importantes.
Por lo tanto, este enfoque permite priorizar y concentrar los esfuerzos en los activos que tienen un mayor impacto en la operación, para garantizar la eficiencia en la gestión empresarial.
¿Cuál es el propósito del análisis de criticidad?
El propósito del análisis de criticidad es evaluar la importancia y el impacto de diferentes elementos. Aquí se refiere a activos o equipos, para priorizar y tomar decisiones informadas en función de su relevancia y riesgo asociado.
Más específicamente, se trata de priorizar activos en un plan de Mantenimiento Productivo Total (TPM). Este programa de supervisión se enfoca en evaluar el estado de los equipos de alta prioridad y realizar un análisis de causa raíz.
De esta manera, se puede determinar qué activos requieren mayor atención y recursos en términos de mantenimiento. El análisis de criticidad permite identificar aquellos equipos que tienen un mayor impacto en la producción y que podrían generar interrupciones significativas en el proceso.
Al priorizar estos activos, se puede implementar un plan de mantenimiento preventivo y correctivo de manera eficiente. Esto asegura un funcionamiento óptimo y minimiza los tiempos de parada no planificados.
¿Para qué sirve un análisis de criticidad?
El análisis de criticidad, en consonancia con el Análisis del Ciclo de Vida (ACV), engloba una amplia gama de áreas dentro de una organización. Estas áreas incluyen:
- Seguridad y el medio ambiente.
 - Impacto en el cliente.
 - La capacidad para aislar fallas.
 - Histórico de mantenimiento preventivo y correctivo.
 - Tiempo promedio entre fallas.
 - Probabilidad de fracaso.
 - Plazo de entrega de las piezas de repuesto.
 
Para lograr un análisis de criticidad efectivo, todas las áreas afectadas de una empresa deben estar involucradas en el proceso. Esto implica áreas como operaciones, ingeniería, mantenimiento, compras, salud y seguridad. De esta forma se asegura incluir todas las funciones operativas de una empresa de forma integral.
¿Qué es la teoría crítica?
La teoría crítica es una corriente filosófica que busca realizar una crítica profunda a la teoría tradicional, la cultura y la moral occidental. Esta surgió en la Escuela de Fráncfort y se enfoca en cuestionar las estructuras sociales y políticas, así como en analizar las relaciones de poder y dominación.
Sus principales exponentes incluyen a Theodor Adorno, Max Horkheimer, Walter Benjamin y Jürgen Habermas, entre otros. Esta teoría tiene como objetivo comprender y transformar la realidad social, promoviendo la liberación del pensamiento del individuo frente a las fuerzas opresivas y explotadoras.
La teoría crítica y la criticidad en este contexto, se relacionan en el análisis y evaluación de las estructuras sociales y poderes dominantes. Ambas perspectivas buscan cuestionar y transformar las condiciones de opresión y desigualdad.
¿Cuáles son los niveles de criticidad?
Dependiendo del contexto y del sistema de evaluación utilizado, los niveles de criticidad pueden variar. En general, se pueden establecer niveles como alta, mediana y baja criticidad.
Estos niveles ayudan a orientar la toma de decisiones y focalizar los esfuerzos en los equipos o elementos más críticos que requieren mayor atención y cuidado. Estos se utilizan para categorizar y priorizar los elementos en función de su importancia y riesgo.
- Niveles bajos de criticidad: generalmente se refieren a elementos que tienen un impacto mínimo en la operación o que pueden ser fácilmente reemplazados o reparados. Estos elementos pueden no requerir una atención inmediata o recursos significativos.
 
- Niveles medianos de criticidad: se atribuyen a elementos que tienen un impacto moderado en la operación y pueden requerir una atención y recursos adecuados para su mantenimiento y reparación.
 
- Niveles altos de criticidad: se asignan a elementos que tienen un impacto significativo en la operación y cuyo fallo puede tener consecuencias graves. Estos elementos requieren una atención prioritaria y una asignación adecuada de recursos para su mantenimiento y garantizar su funcionamiento óptimo.
 
¿Cómo se desarrolla la criticidad en una empresa?
El desarrollo de la criticidad en una empresa generalmente implica seguir ciertos pasos y procesos. A continuación, se describe un enfoque típico para el desarrollo de la criticidad:
- Identificación de los activos: el primer paso es identificar los activos relevantes en la empresa, como equipos, maquinaria, sistemas, procesos, etc.
 
- Evaluación de la importancia relativa: se evalúa la importancia relativa de cada activo en función de distintos factores: su impacto en la operación, el riesgo que se asocia y las consecuencias de su falla.
 - Clasificación de criticidad: los activos se clasifican en diferentes niveles de criticidad, como alta, media y baja criticidad. Esta clasificación ayuda a editar la priorización de los recursos y las acciones según la importancia y el riesgo de cada activo.
 - Desarrollo de estrategias de mantenimiento: esto implica determinar la frecuencia y el tipo de mantenimiento necesario para garantizar el rendimiento óptimo de los activos críticos.
 
- Seguimiento y revisión continua: la criticidad de los activos puede cambiar con el tiempo debido al desgaste, el envejecimiento o la prioridad de las necesidades. Por lo tanto, es importante realizar un seguimiento y una revisión periódica para ajustar las estrategias de mantenimiento según sea necesario.
 
Ejemplos de criticidad en el ambiente laboral
En un entorno laboral, la criticidad puede manifestarse en diferentes aspectos. A continuación, te presentamos algunos ejemplos de criticidad en un área de trabajo:
- Seguridad: este es un aspecto crítico en cualquier entorno laboral. Los riesgos como condiciones inseguras o falta de capacitación adecuada, pueden tener consecuencias graves en la confiabilidad de los trabajadores y la empresa en general.
 
- Salud ocupacional: incluye la exposición a sustancias peligrosas, la falta de medidas de higiene o la falta de ergonomía en los puestos de trabajo. Esto puede tener un impacto significativo en la salud de los empleados.
 - Cumplimiento normativo: no cumplir las normas, ética y regulaciones puede tener consecuencias legales y financieras para una empresa. Esto puede incluir las normas de la seguridad laboral, la protección del medio ambiente y los derechos de los trabajadores.
 - Continuidad operativa: el fallo de equipos clave o la interrupción en la cadena de suministro pueden afectar negativamente la producción y la entrega de productos y servicios.
 
- Impacto en la reputación: las acciones que afectan la reputación de la empresa pueden tener un impacto crítico en su éxito. La mala gestión, la falta de transparencia o la violación de normas pueden dañar su imagen y la confianza de los clientes.
 
¿Qué es análisis crítico?
El análisis crítico es un enfoque que busca examinar y cuestionar de manera profunda las estructuras, ideas y prácticas dominantes. Se utiliza en diversos contextos, como la academia, la literatura, la política y los estudios sociales, para analizar y comprender las relaciones de poder y las injusticias en la sociedad.
En la literatura, es un proceso de evaluación detallada y reflexiva. Este permite al lector examinar y comprender en profundidad un texto, artículo, libro u otra forma de investigación o expresión escrita.
El objetivo del análisis crítico es formarse una opinión objetiva, identificar posibles sesgos, debilidades metodológicas o errores en el razonamiento. Su enfoque también consiste en evaluar la calidad y validez de los argumentos presentados.
Este proceso implica desarrollar argumentos sólidos y fundamentados en base a la evidencia disponible.
¿Cuál es la visualización del análisis de criticidad?
La visualización del análisis de criticidad se refiere al enfoque y a las herramientas que se utilizan para hacer la evaluación respectiva. En muchos casos se utilizan herramientas como gráficos de barras o diagramas para representar la criticidad de los elementos que se están evaluando.
Estos gráficos suelen mostrar la distribución descendente de los sistemas o elementos evaluados. Luego, se clasifica en diferentes zonas de criticidad, como alta, mediana y baja.
Esta metodología permite identificar de manera más clara los elementos que requieren mayor atención y enfoque. Los mismos suelen ubicarse en la zona de alta criticidad. Esto facilita la toma de decisiones y la asignación de recursos de manera más efectiva.
Uno de los enfoques más comunes para evaluar el riesgo es mediante una cuadrícula de 6x6, donde se analiza la probabilidad de un fallo en relación con su gravedad. Esto permite generar un número de prioridad de riesgo (RPN) que indica la importancia de cada riesgo identificado.
Otro enfoque habitual que implica evaluar todas categorías principales de manera individual: salud, medio ambiente, seguridad, fiabilidad, etc. De esta manera, se determina cuál es el fallo más crítico y se asigna un número de riesgo a cada consecuencia.
En este tipo de análisis, es común utilizar una escala de criticidad que va de 0 a 6 o de 0 a 10 para cada categoría. Un valor de 0 indica que el riesgo no tiene impacto, mientras que un valor de 6 (o 10) señala que el riesgo tiene el mayor impacto posible.
Es importante llevar a cabo el análisis de criticidad en dos etapas. En la primera etapa, se debe involucrar a un equipo interfuncional que incluya al personal de las diferentes áreas implicadas de la organización. Esto garantiza una visión integral del análisis y permite la participación de diferentes perspectivas.
La segunda etapa implica realizar el proceso de análisis frecuentemente a lo largo de la vida útil del activo. Esto es fundamental para determinar si existen medidas de mitigación de riesgos o si hay cambios importantes que requieran una reevaluación.
¿Que establece la matriz de la criticidad?
La matriz de criticidad es la que establece la evaluación y clasificación de los elementos o activos según su importancia o grado de criticidad. Es por medio de este análisis que se puede identificar y definir las estrategias de mantenimiento para darle prioridad a aquellos elementos que tienen un mayor impacto en la producción, seguridad o funcionamiento de una empresa.
¿Cómo realizar un análisis de criticidad?
La forma de realizar un análisis de criticidad no depende de una sola fórmula. De hecho, es posible emplear diversos enfoques para abordar una evaluación de este tipo. Dos métodos comúnmente utilizados son: simple y profundo.
El error que comenten muchas organizaciones, es asumir que todos los activos son críticos, cuando en realidad, solo el 20% de ellos lo es. Por lo tanto, es fundamental elaborar una lista de los activos clave que se consideren críticos. Luego, corresponde calcular los costos asociados a los tiempos de inactividad y las reparaciones de estos equipos.
A modo de ejemplo, una bomba que genera vapor para mantener en movimiento los motores, es más importante que los propios motores. Por lo tanto, la bomba tiene prioridad para ser es un activo crítico porque de ella depende el funcionamiento de toda la operación.
¿Cómo calcular la criticidad de los activos?
Para calcular la criticidad de los activos se pueden seguir diferentes enfoques y metodologías. Algunas de las formas comunes incluyen el análisis de riesgo, de fallos y el de consecuencias. A continuación, se presenta un ejemplo práctico para realizar un análisis de criticidad:
- Evaluar las dimensiones relevantes: para determinar la criticidad de un activo, se deben evaluar diferentes dimensiones, como la salud y seguridad, el medio ambiente, la producción y la operación. Se asigna un valor del 1 al 5 a cada dimensión, donde 1 representa un impacto insignificante y 5 representa un impacto catastrófico.
 - Calcular el número de prioridad de riesgo (RPN): este se calcula multiplicando los valores asignados a cada dimensión. Por ejemplo, si un activo tiene un valor de 4 en salud y seguridad, 3 en medio ambiente, 2 en producción y 5 en operación, el RPN sería 4 * 3 * 2 * 5 = 120.
 - Clasificar los activos según el RPN: aquí los valores más altos indican una mayor criticidad. Se pueden establecer diferentes rangos de criticidad, como alta, media y baja, para facilitar la clasificación.