¿Qué es un filtro sanitario? - Definición, funcionamiento y aplicaciones

Qué es un filtro sanitario

El dispositivo conocido como filtro sanitario tiene una gran importancia para asegurar nuestra calidad de vida, puesto que tiene la capacidad de purificar el aire y el agua. Así que, en este artículo, se explica qué es un filtro sanitario, cuáles son sus usos y cómo funcionan. De igual manera, se menciona su clasificación y procesos que realiza dependiendo del sector donde se aplique.

Índice()
  1. ¿Para qué sirve un filtro sanitario?
  2. ¿Cuál es el funcionamiento de un filtro sanitario?
    1. Filtración mecánica
    2. Filtración química
    3. Filtración biológica
  3. Usos de los filtros sanitarios
    1. Filtros sanitarios en el sector alimentario
    2. Filtros sanitarios en sistemas de ventilación
    3. Filtros sanitarios en sistemas de tratamiento de agua

¿Para qué sirve un filtro sanitario?

Un filtro sanitario es un dispositivo que se utiliza con el fin de eliminar o reducir la presencia de microorganismos, partículas o sustancias indeseables en un fluido, como el agua, el aire o el vapor. Los filtros sanitarios se emplean en lugares donde se requiere limpieza y seguridad, como las empresas de embotellamiento de agua potable, la elaboración de alimentos y bebidas, los productos farmacéuticos, la biotecnología o el cuidado de la salud.

¿Cuál es el funcionamiento de un filtro sanitario?

Los filtros sanitarios se basan en diferentes mecanismos de separación de contaminantes del fluido, esto según el tipo de material filtrante con el que se trabaje y el tamaño de los poros que tengan.

Filtración mecánica

La filtración mecánica consiste en retener las partículas sólidas o líquidas que son más grandes que los poros del material filtrante, lo cual se logra mediante la fuerza de la gravedad o la presión. Por ejemplo, los filtros de arena, los de tela o los de papel.

Filtración química

Por su parte, la filtración química se trata de atrapar o neutralizar las sustancias químicas que son perjudiciales para la calidad del fluido, mediante la acción de un agente que cumpla la función de reactivo o adsorbente. Por ejemplo, los filtros de carbón activado, los de resina de intercambio iónico o los de zeolita.

Filtración biológica

Por último, la filtración biológica busca aprovechar la actividad de microorganismos que se encargan de descomponer o transformar la materia orgánica y remover los elementos sólidos del agua contaminada o cualquier otro fluido, mediante procesos aerobios o anaerobios. Por ejemplo, los filtros de lecho bacteriano, los de biopelícula o los de bioaerosol.

Usos de los filtros sanitarios

Los filtros sanitarios se pueden aplicar en diversos campos o áreas con muchos usos, no obstante, estos pueden variar según el sector y la aplicación en la que se empleen.

  • Purificar el agua potable o el agua para uso industrial, eliminando las impurezas, los microbios, los metales pesados, el cloro o los malos olores.
  • Mejorar el nivel de la calidad del aire en ambientes cerrados, tales como hospitales, laboratorios, salas blancas para pacientes o aviones. De esta manera, se eliminan las partículas en suspensión, los alérgenos, las enfermedades, los virus, las bacterias o los compuestos orgánicos volátiles.
  • Esterilizar el vapor que se utiliza para procesos y servicios térmicos, como la pasteurización, la esterilización o el secado, removiendo las partículas y los microorganismos que suelen afectar a la calidad del producto final.
  • Busca proteger el medio ambiente, al reducir el impacto ambiental de las aguas residuales o los gases de combustión, eliminando la materia orgánica, los nutrientes, los patógenos o los contaminantes atmosféricos.

Filtros sanitarios en el sector alimentario

Los filtros sanitarios se describen como dispositivos que emplean para eliminar o reducir la presencia de microorganismos, partículas o sustancias maliciosas. En ese sentido, los filtros sanitarios en el sector alimentario se suelen utilizar con el objetivo de garantizar la calidad e inocuidad de los alimentos y bebidas que se producen o consumen.

De esta manera, los filtros sanitarios tienen la obligación de cumplir con las normas sanitarias que establecen las autoridades competentes de una nación o un territorio en específico, así como aquellas normas dictadas por las organizaciones internacionales. Por ejemplo, hay que destacar la Norma Sanitaria 3-A.

En una clasificación, es posible mencionar varios tipos diferentes de filtros sanitarios, la cual, tiende a variar según el mecanismo de separación de residuos que las empresas utilicen. Entre estos procesos destacan la filtración mecánica, la filtración química o la filtración biológica, descritos en la sección superior

Los usos más importantes de filtros sanitarios se observan en los sistemas de purificación de agua potable o el agua para uso industrial. No obstante, también se emplea en algunas situaciones en donde se requiere mejorar la calidad del aire en ambientes cerrados, así como en la esterilización del vapor que trabaja en los procesos térmicos. Con todo esto, se logra proteger el medio ambiente porque se reduce la contaminación de del agua y del aire.

Filtros sanitarios en sistemas de ventilación

Ahora bien, los filtros sanitarios en sistemas de ventilación se utilizan con la finalidad de mejorar la calidad del aire en el interior de los edificios, ya sea una casa, un apartamento o un almacén de una empresa. En ese sentido, trabajan de forma especial en lugares donde hay personas vulnerables o que se encuentran expuestas a riesgos de salud. Por ejemplo, lugares como hospitales, laboratorios, salas blancas e incluso medios de transporte como algunas cabinas de tren y aviones.

Los filtros sanitarios en los sistemas de ventilación tienen la obligación de impedir que se superen los niveles de concentración de partículas en el aire. Dicho límite de concentración lo establece la Organización Mundial de la Salud (OMS) en conjunto con las autoridades sanitarias de cada nación, luego de un proceso de revisión en donde fijan el estándar que consideran saludable

Otra clasificación de los filtros sanitarios destaca por sus aplicaciones, allí, se encuentran dispositivos como los separadores de polvo, los denominados filtros HEPA y los filtros de aire. De esta manera, los filtros sanitarios se deben seleccionar de manera cuidadosa según su eficacia al retener la contaminación del ambiente. Otros aspectos que hay que considerar son la facilidad de uso, la solidez del aparato, y su aceptabilidad. Así mismo, hay que pensar en los posibles riegos que supone dicho objeto, su asequibilidad en el mercado y su durabilidad en el tiempo.

Filtros sanitarios en sistemas de tratamiento de agua

En cuanto a los filtros sanitarios en sistemas de tratamiento de agua, hay que destacar que se utilizan con el objeto de tratar las aguas residuales domésticas o industriales, previo a su reutilización o vertido al medio ambiente. De esta manera, los filtros sanitarios en sistemas de tratamiento de agua deben eliminar o reducir los contaminantes presentes en el agua, removiendo la materia orgánica, además de los contaminantes atmosféricos o posibles patógenos.

Esta clase de filtros sanitarios también cuentan con su propia clasificación, donde pueden ser de diferentes tipos, ya que cumplen distintos procesos. Por ejemplo, cumplen con la ultrafiltración, la electrodiálisis, la ósmosis inversa e incluso con la nanofiltración, Por estos motivos, los filtros sanitarios deben contar con un diseño y manejo que saque el mejor provecho a las características del agua que se debe tratar, siempre siguiendo las normas ambientales vigentes.

Cómo citar:
"¿Qué es un filtro sanitario? - Definición, funcionamiento y aplicaciones". En Quees.com. Disponible en: https://quees.com/filtro-sanitario/. Consultado: 18-05-2024 17:17:38
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