¿Qué es un blastocisto? - Conoce la función y tipos de blastocistos
El blastocisto es una etapa crítica en el desarrollo temprano de los mamíferos, que se produce unos días después de la fertilización del óvulo por el espermatozoide. Esta estructura es esencial para la implantación exitosa del embrión en el útero materno y el posterior desarrollo del feto.
Esta etapa tiene una estructura compleja y está compuesta por diferentes tipos de células que realizan funciones específicas.
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En este artículo exploraremos en detalle qué es un blastocisto, su estructura y los diferentes tipos de blastocistos que existen. También discutiremos la función crítica del blastocisto en el proceso de implantación y cómo su desarrollo adecuado es fundamental para la salud y el bienestar del feto en desarrollo.
Definición y significado de blastocisto o blástula
El blastocisto o blástula es una etapa temprana del desarrollo embrionario en los animales, incluyendo a los seres humanos.
Es una esfera hueca compuesta por una capa externa de células llamada trofoblasto y una masa celular interna llamada embrioblasto, que dará lugar al embrión propiamente dicho.
¿Cuál es la función de los blastocistos?
La principal función de los blastocistos es la implantación en el útero materno durante el proceso de embarazo. Una vez que el blastocisto se ha formado, se implanta en el revestimiento del útero donde comienza a crecer y desarrollarse en un feto.
El blastocisto es responsable de la formación de las células pluripotentes, las cuales darán lugar a todos los tipos de células en el cuerpo humano. Éstas células son importantes en la investigación médica y la terapia celular, ya que tienen la capacidad de diferenciarse en diferentes tipos de células y tejidos.
¿Dónde se encuentran los blastocistos?
Los blastocistos se encuentran en el útero de la madre después de que el embrión se ha desarrollado y se ha dividido varias veces después de la fecundación del óvulo.
En los seres humanos, el blastocisto se forma en las trompas de Falopio después de que el espermatozoide fertiliza al óvulo, y luego viaja al útero para la implantación en el revestimiento del mismo.
En la fertilización in vitro (FIV) los blastocistos se desarrollan fuera del cuerpo, en un laboratorio, y luego se transfieren al útero de la madre.
¿Cómo se forma un blastocisto?
El blastocisto se forma a partir de la célula huevo fecundada (zigoto), que se divide varias veces a medida que viaja por las trompas de Falopio hacia el útero. Después de varias divisiones celulares, la masa celular interna del embrión se separa de la capa externa de células y se forma una cavidad llena de líquido en el centro del embrión. Esta cavidad se conoce como blastocele.
La capa externa de células que rodea el blastocele se convierte en el trofoblasto, que será responsable de la implantación en el útero y la formación de la placenta. La masa celular interna se convierte en el embrioblasto, que es la fuente de todas las células del cuerpo humano.
Finalmente, el embrión continúa desarrollándose en el feto a medida que se implanta en el útero y forma la conexión con la placenta.
Después de que se forma el blastocisto, éste se divide en dos tipos principales de células:
- Las células del trofoblasto.
- Las células del embrioblasto.
Las células del trofoblasto se encargan de formar la placenta y la membrana que rodea al embrión, mientras que las células del embrioblasto son las precursoras de las tres capas germinales que forman los órganos del cuerpo humano.
En esta etapa temprana del desarrollo embrionario el blastocisto está en un estado pluripotencial, lo que significa que sus células tienen la capacidad de convertirse en cualquier tipo de célula del cuerpo.
Después de que el blastocisto llega al útero, comienza el proceso de implantación en el revestimiento del útero. El trofoblasto se adhiere a las células del revestimiento del útero y forma una estructura de anclaje llamada trofoblasto invasivo.
A medida que el trofoblasto se adhiere más firmemente, comienza a formar una serie de pequeñas estructuras conocidas como villi coriónicas, que proporcionan una superficie adicional para la absorción de nutrientes del revestimiento del útero. Finalmente, el embrión se implanta completamente en el revestimiento del útero y la placenta comienza a formarse a partir del trofoblasto.
Es importante destacar que el proceso de formación del blastocisto ocurre de manera natural durante la fecundación y el desarrollo temprano del embrión en el útero materno. Sin embargo, en la medicina reproductiva, el blastocisto también juega un papel clave en las técnicas de fertilización in vitro (FIV) y en la reproducción asistida.
Durante la FIV, los óvulos y los espermatozoides se unen en un laboratorio para formar embriones que se cultivan durante unos días hasta que llegan al estadio de blastocisto. Luego, los embriones de blastocisto se transfieren al útero de la mujer con la esperanza de lograr una implantación exitosa. Esta técnica se ha convertido en una opción común para las parejas que experimentan problemas de fertilidad (infertilidad).
La infertilidad es un problema de salud que afecta a muchas parejas en todo el mundo. Se define como la incapacidad de concebir después de un año de relaciones sexuales regulares sin protección. Hay varias causas de infertilidad, tanto en hombres como en mujeres, que pueden dificultar o impedir la fertilización y el embarazo.
- En los hombres, los problemas de fertilidad pueden estar relacionados con la calidad del esperma, la cantidad de espermatozoides producidos o la función reproductiva. Algunas causas comunes incluyen:
- Enfermedades de transmisión sexual.
- Lesiones.
- Enfermedades crónicas.
- Consumo de alcohol y drogas.
- Ciertos medicamentos.
- En las mujeres, la infertilidad puede estar relacionada con problemas ovulatorios, trastornos hormonales, enfermedades de transmisión sexual, endometriosis, anormalidades uterinas o de las trompas de Falopio, y edad avanzada.
En cuanto a la reproducción asistida, el conocimiento del blastocisto y su desarrollo ha llevado a un mejor control del proceso de fertilización, lo que ha mejorado la tasa de éxito de los tratamientos de reproducción asistida. Además, la capacidad de seleccionar embriones de alta calidad basados en su desarrollo hasta el estadio de blastocisto ha aumentado la tasa de éxito en la FIV y ha permitido reducir el riesgo de embarazos múltiples.
Es importante tener en cuenta que a pesar de los beneficios de la FIV y otras técnicas de reproducción asistida también hay preocupaciones éticas en torno al uso de embriones de blastocisto. Por ejemplo, algunas personas pueden argumentar que la manipulación de embriones en el laboratorio y la selección de embriones basados en su calidad puede ser considerado como una forma de jugar a ser Dios.
Además, también hay debates en torno al uso de embriones sobrantes, que son aquellos que no se transfieren durante un tratamiento de FIV. Estos embriones pueden ser congelados para su uso futuro, donados a otras parejas o a la investigación médica. Sin embargo algunas personas argumentan que los embriones sobrantes deben ser tratados como seres humanos y no deberían ser destruidos o manipulados.
¿Cuántos tipos de blastocistos existen?
En general se pueden distinguir dos tipos de blastocistos: el blastocisto humano y el blastocisto de otros mamíferos.
- El blastocisto humano es el tipo más estudiado y conocido debido a su relevancia en la medicina reproductiva. Este tipo de blastocisto se forma durante la fecundación y el desarrollo temprano del embrión humano, y está compuesto por una capa externa llamada trofoblasto y una masa celular interna llamada embrioblasto.
- El blastocisto de otros mamíferos también se compone de una capa externa y una masa celular interna, pero puede presentar algunas diferencias estructurales y funcionales en comparación con el blastocisto humano. Por ejemplo, algunos mamíferos como los roedores tienen blastocistos que son capaces de implantarse y desarrollarse en el útero materno en un estado temprano, mientras que el blastocisto humano necesita alcanzar un estado más avanzado antes de poder implantarse.
Además de los dos tipos de blastocistos mencionados anteriormente, también se pueden clasificar los blastocistos humanos en función a su grado de desarrollo. Se utilizan distintos criterios para determinar el grado de desarrollo, como la cantidad de células del embrión o la calidad del trofoblasto.
En este sentido, se pueden distinguir tres tipos de blastocistos humanos:
- Blastocisto temprano: Es el estado más temprano del blastocisto humano y se caracteriza por presentar una masa celular interna y un trofoblasto poco desarrollado. En este estado el embrión aún no ha completado su proceso de segmentación celular y se encuentra en las primeras etapas de su desarrollo.Durante esta etapa el blastocisto se encuentra en la trompa de Falopio donde se produce la fecundación. A medida que el embrión se desplaza hacia el útero, el trofoblasto comienza a formar una capa alrededor del embrión que lo protege y lo prepara para su implantación en el endometrio del útero.
Es importante destacar que en esta etapa temprana del desarrollo embrionario, el blastocisto es muy vulnerable y puede verse afectado por factores externos como la edad de la mujer, el estilo de vida y otros factores que pueden comprometer su viabilidad y capacidad de implantación.
Por esta razón, en los tratamientos de fertilidad como la fecundación in vitro (FIV), los especialistas en reproducción asistida suelen evaluar cuidadosamente la calidad del blastocisto temprano antes de proceder con su transferencia al útero.
- Blastocisto intermedio: Es un estado intermedio del blastocisto humano, en el que la masa celular interna y el trofoblasto comienzan a desarrollarse y diferenciarse. Durante esta etapa, el blastocisto continúa su proceso de segmentación celular y empieza a formar estructuras celulares que darán lugar a las distintas capas de tejidos del futuro embrión.En el interior del blastocisto intermedio se puede observar la presencia de una cavidad llena de líquido llamada blastocele, que se encuentra rodeada por el trofoblasto. Este último se divide en dos capas distintas: la capa externa o sincitiotrofoblasto, que permite la interacción del blastocisto con el endometrio, y la capa interna o citotrofoblasto, que se encarga de la nutrición del embrión.
En esta etapa del desarrollo embrionario, el blastocisto aún no ha alcanzado su estado de madurez completo, pero ya presenta una mayor complejidad y organización celular. Es en este estado intermedio donde se lleva a cabo la implantación del blastocisto en el endometrio del útero, que es un proceso crucial para el inicio del embarazo.
En los tratamientos de fertilidad los especialistas en reproducción asistida suelen seleccionar blastocistos intermedios de alta calidad para su transferencia al útero durante la FIV, ya que presentan una mayor probabilidad de éxito en la implantación y el embarazo.
- Blastocisto tardío: Es el estado más avanzado del blastocisto, en el que se observa una masa celular interna bien desarrollada y un trofoblasto de alta calidad.
Cabe destacar que el grado de desarrollo del blastocisto se asocia con una mayor probabilidad de éxito en la implantación y el embarazo durante los tratamientos de fertilidad. Por esta razón los expertos en reproducción asistida suelen seleccionar blastocistos de alta calidad para su transferencia durante los tratamientos de FIV.
Blastocistos tardío
El blastocisto tardío es el estado final del blastocisto humano y se caracteriza por una mayor diferenciación y especialización celular en la masa celular interna y el trofoblasto. Durante esta etapa, las células de la masa celular interna se organizan en dos capas distintas: el epiblasto, que dará lugar al embrión propiamente dicho, y el hipoblasto, que formará la membrana que rodea al saco vitelino.
Por su parte, el trofoblasto también presenta una mayor complejidad y se diferencia en distintas subcapas que desempeñan funciones específicas en la implantación y el desarrollo del embrión. En esta etapa, el blastocisto ya ha alcanzado su madurez completa y se encuentra preparado para su implantación en el endometrio del útero.
El blastocisto tardío es el estado en el que se encuentra el embrión en el momento de la implantación y es el inicio del embarazo.
Durante la implantación, el trofoblasto se adhiere al endometrio y comienza a invadirlo, lo que desencadena una serie de cambios hormonales y biológicos que permiten al embrión desarrollarse y crecer en el útero.
¿Cuáles son las partes de un blastocisto?
Un blastocisto está compuesto por dos partes principales: la masa celular interna y el trofoblasto. A continuación describiremos en qué consiste cada una de ellas:
- La masa celular interna es una agrupación de células que se encuentra en el interior del blastocisto y que dará lugar al embrión propiamente dicho. Estas células se organizan durante el desarrollo temprano del embrión en dos capas distintas: el epiblasto y el hipoblasto.
- El epiblasto es la capa más externa de la masa celular interna y es la que da lugar a las tres capas germinales (ectodermo, mesodermo y endodermo) que forman los distintos tejidos y órganos del cuerpo humano.
- En cambio, el hipoblasto es la capa más interna y forma la membrana que rodea al saco vitelino.
Además, la masa celular interna es responsable de la formación de las células pluripotentes, que son células madre capaces de diferenciarse en cualquier tipo de célula del cuerpo. Estas células pluripotentes son de gran interés para la medicina regenerativa y la terapia génica, ya que podrían utilizarse para tratar enfermedades y lesiones mediante la generación de tejidos y órganos sanos a partir de células madre.
El ectodermo es una de las capas germinales del embrión que se origina a partir de la masa celular interna del blastocisto. Es responsable de la formación de una amplia variedad de tejidos y estructuras en el cuerpo humano, incluyendo la piel, el cabello, las uñas, el sistema nervioso y los órganos sensoriales.
El mesodermo es una de las capas germinales del embrión que se origina a partir de la masa celular interna del blastocisto. Es responsable de la formación de diversos tejidos y estructuras del cuerpo humano, incluyendo los músculos, los huesos, los vasos sanguíneos, el corazón, los riñones y los órganos reproductores, entre otros.
El endodermo es una de las capas germinales del embrión que se origina a partir de la masa celular interna del blastocisto. Es responsable de la formación de los tejidos y órganos internos del cuerpo humano, como el revestimiento interno del tracto gastrointestinal, el hígado, el páncreas, los pulmones y la vejiga urinaria, entre otros.
- Por otro lado, el trofoblasto es una capa de células que rodea al blastocisto en su fase temprana de desarrollo. Es la primera estructura que se forma a partir de la masa celular externa del blastocisto y es esencial para la implantación del embrión en el útero y para el desarrollo de la placenta.
El trofoblasto se divide en dos capas: el citotrofoblasto y el sincitiotrofoblasto. El citotrofoblasto es la capa más interna y se compone de células individuales que se multiplican activamente. Estas células forman las vellosidades coriónicas, que son estructuras similares a dedos que se extienden en el tejido uterino y proporcionan una superficie para el intercambio de nutrientes y gases entre la madre y el feto.
El sincitiotrofoblasto, por su parte, es la capa más externa del trofoblasto y se forma a partir de la fusión de células del citotrofoblasto. Estas células fusionadas forman un sincitio multinucleado que tiene la capacidad de invadir el tejido uterino para permitir la implantación del embrión y la formación de la placenta. El sincitiotrofoblasto también secreta hormonas importantes para el mantenimiento del embarazo, como la hormona gonadotropina coriónica humana (hCG).